.

.

viernes, 15 de mayo de 2015

Transcripción de mi intervención para fijar un Punto de Acuerdo para solicitar la comparecencia del Director del IMSS, por la muerte de dos bebés en Chiapas


México D.F., a 13 de mayo de 2015

DIPUTADA ESTHER QUINTANA SALINAS (EQS): Con su venia, Diputado Presidente.

En el artículo 4° constitucional se establece que todos los mexicanos tenemos derecho a la salud.

El Instituto Mexicano del Seguro Social es una de estas instituciones, cuya obligación es poner al alcance de sus derechohabientes, los servicios de salud de calidad y cantidad, idóneos para el ejercicio del derecho a la protección, precisamente, de la salud.

Resulta entonces, preocupante, en el caso de 37 menores de edad que presentaron reacciones alérgicas, derivadas de la aplicación de vacunas, por parte del personal de salud de ese Instituto, el pasado 8 de mayo del presente año.

Estos hechos ocurren en una de las regiones más marginadas de nuestro país, Simojovel, Chiapas.

Ya murieron dos menores de edad y otros 30 se encuentran bajo atención médica.

Ya quisiera yo que nos viéramos en los zapatos de los padres de familia que están pasando por semejante trance.

Las vacunas que recibieron los niños fueron contra la tuberculosis, el rotavirus y hepatitis B.
Hasta este momento, José Antonio González Anaya, Director del Instituto Mexicano del Seguro Social, no ha sido lo suficientemente contundente, en la explicación  de esta tragedia.

Los padres de estos menores merecen una explicación por daños irreparables, pues se trata de la pérdida de dos vidas.

Los menores hospitalizados también, tienen derecho a recuperar su salud y en esto tiene, un papel determinante, este hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Según la Norma Oficial Mexicana, NOM-036-SSA2-2002, que establece la prevención y control de las enfermedades para la aplicación de vacunas toxoides, sueros, antitoxinas e inmunoglobulinas en el humano para el manejo y conservación de los biológicos que debe cumplir, entre otras, se requiere las siguientes acciones:

Dice la Norma, que se requiere vigilar el funcionamiento adecuado de la red o cadena de frío, en todas sus unidades de salud y áreas administrativas o de distribución, disponiendo para ello de equipo y personal capacitado, en los procedimientos de almacenamiento, conservación, distribución, control y transporte de biológicos.

Otra disposición es que, el transporte de los biológicos se deberá realizar del nivel nacional a nivel estatal, regional y local, empleando medios refrigerantes, que mantengan la temperatura entre 2° centígrados y 8° centígrados.

También dispone que la temperatura del almacenamiento de la cámara fría y de los refrigeradores, deben registrarse gráficamente, por lo menos cada ocho horas, y hay que estar vigilantes de la vida útil de ellos.

¿Qué de todo esto habrá fallado? No lo sabemos.

Derivado de esto, los legisladores de Acción Nacional consideramos que los servicios de salud, deben constituirse en instrumentos protectores de la vida humana y no en un riesgo para ella.

Que la pérdida de la vida de un menor, no admite excusa alguna.

Consideramos indispensable entonces, que el Director del Instituto Mexicano del Seguro Social explique con claridad lo ocurrido.
Con base en ello, las autoridades competentes deberán tomar acciones para sancionar a aquellos funcionarios que hayan sido responsables de semejante y doloroso hecho.

Es por ello que estimamos urgente, que el Licenciado José Antonio González Anaya, comparezca ante la Primera Comisión de esta Comisión Permanente, a dar todo género de explicaciones que aclaren esta tragedia que está sucediendo –insisto— en una parte de nuestro país, donde la marginación y la pobreza realmente son estrujantes.

Es cuanto, Diputado Presidente, muchas gracias. –Perdón, Senador—.




En el artículo 4° constitucional se establece que todos los mexicanos tenemos derecho a la salud.

El Instituto Mexicano del Seguro Social es una de estas instituciones, cuya obligación es poner al alcance de sus derechohabientes, los servicios de salud de calidad y cantidad, idóneos para el ejercicio del derecho a la protección, precisamente, de la salud.

Resulta entonces, preocupante, en el caso de 37 menores de edad que presentaron reacciones alérgicas, derivadas de la aplicación de vacunas, por parte del personal de salud de ese Instituto, el pasado 8 de mayo del presente año.

Estos hechos ocurren en una de las regiones más marginadas de nuestro país, Simojovel, Chiapas.

Ya murieron dos menores de edad y otros 30 se encuentran bajo atención médica.

Ya quisiera yo que nos viéramos en los zapatos de los padres de familia que están pasando por semejante trance.

Las vacunas que recibieron los niños fueron contra la tuberculosis, el rotavirus y hepatitis B.
Hasta este momento, José Antonio González Anaya, Director del Instituto Mexicano del Seguro Social, no ha sido lo suficientemente contundente, en la explicación  de esta tragedia.

Los padres de estos menores merecen una explicación por daños irreparables, pues se trata de la pérdida de dos vidas.

Los menores hospitalizados también, tienen derecho a recuperar su salud y en esto tiene, un papel determinante, este hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Según la Norma Oficial Mexicana, NOM-036-SSA2-2002, que establece la prevención y control de las enfermedades para la aplicación de vacunas toxoides, sueros, antitoxinas e inmunoglobulinas en el humano para el manejo y conservación de los biológicos que debe cumplir, entre otras, se requiere las siguientes acciones:

Dice la Norma, que se requiere vigilar el funcionamiento adecuado de la red o cadena de frío, en todas sus unidades de salud y áreas administrativas o de distribución, disponiendo para ello de equipo y personal capacitado, en los procedimientos de almacenamiento, conservación, distribución, control y transporte de biológicos.

Otra disposición es que, el transporte de los biológicos se deberá realizar del nivel nacional a nivel estatal, regional y local, empleando medios refrigerantes, que mantengan la temperatura entre 2° centígrados y 8° centígrados.

También dispone que la temperatura del almacenamiento de la cámara fría y de los refrigeradores, deben registrarse gráficamente, por lo menos cada ocho horas, y hay que estar vigilantes de la vida útil de ellos.

¿Qué de todo esto habrá fallado? No lo sabemos.

Derivado de esto, los legisladores de Acción Nacional consideramos que los servicios de salud, deben constituirse en instrumentos protectores de la vida humana y no en un riesgo para ella.

Que la pérdida de la vida de un menor, no admite excusa alguna.

Consideramos indispensable entonces, que el Director del Instituto Mexicano del Seguro Social explique con claridad lo ocurrido.
Con base en ello, las autoridades competentes deberán tomar acciones para sancionar a aquellos funcionarios que hayan sido responsables de semejante y doloroso hecho.

Es por ello que estimamos urgente, que el Licenciado José Antonio González Anaya, comparezca ante la Primera Comisión de esta Comisión Permanente, a dar todo género de explicaciones que aclaren esta tragedia que está sucediendo –insisto— en una parte de nuestro país, donde la marginación y la pobreza realmente son estrujantes.

Es cuanto, Diputado Presidente, muchas gracias. –Perdón, Senador—.


--ooOOoo--

No hay comentarios:

Publicar un comentario